lunes, 16 de abril de 2012

Cap 5. María

Llegamos a un pequeño supermercado y entramos, no había casi nadie tan solo un par de personas apuradas por tener que ir a trabajar. Cogí  el  carrito y me adentré en los blancos pasillos seguida de Sol. De cada pasillo cogíamos las cosas que necesitábamos, carne, fruta, verdura, pescado, incluso productos de limpieza, con sus grandes etiquetas fluorescentes. Por fin llegamos a mi pasillo favorito, el de las galletas y chocolate. En seguida se me hizo la boca agua y me giré para ver a Sol mirándome con cara de susto, reí por un segundo y corrí arrastrando el carrito como una loca hacia la primera estantería, llena de galletas. Pegué un brusco frenazo y metí tres cajas a la vez de oreos, seguidas de otras dos de cookies. Después fui a la segunda estantería, chocolate. Cogí una bolsa de M&M y otra de conguitos, por último cogí el bote más grande de Nutella. Cuando lo iba a meter se acercó Sol.

-María, ya llevas demasiadas cosas- dijo detrás de mí.
-Nop- dije alargando la palabra.
-Yo creo que sí- puso su mano sobre el bote.
-No, no y no-dije quitándole la mano.

En ese momento empezó un tira y afloja acompañado de las palabras no y sí. Cuando estaba poniendo mi mejor cara de cachorrito oímos unas suaves carcajadas que nos hizo girarnos.

Niall

Abrí los ojos rápidamente cuando oí el atronador sonido de mi despertador, lo miré, las 8 de la mañana, perfecto, fui al cuarto de baño y me di una ducha rápida para despejarme. Me puse unos vaqueros y una camiseta blanca, tapada por una de mis características sudaderas. Hoy era día libre, así que baje las escaleras sigilosamente, para no despertar a los demás que seguramente seguirían durmiendo cómo troncos. Llegué a la cocina y me asomé, ahí estaba Liam de espaldas apuntando algo en un papelito.

-¡Buh!- dije y me empecé a reír por el brinco que había pegado.
-No hace gracia, Niall- dijo serio mirando el interior de la nevera.
-No me digas que no hay comida-dije mirando la lista de la compra que segundos antes había sido un pequeño papelito.
-Pues no, y conociéndote a ti y a los demás diría que tengo que ir a comprar algo si no quiero que me matéis- dijo sonriendo burlón. -¿Quieres venir conmigo?
-Claro, no tengo nada que hacer y así podré coger lo que quiera- dije recalcando las últimas palabras.
-Anda, vamos al pequeño supermercado de la entrada al centro, seguramente allí no haya nadie, y podamos hacer la compra tranquilos.

Asentí, y abrí la puerta cogiendo mi bufanda del perchero, esperé a que Liam se pusiera los zapatos y cerré la puerta detrás de él. Ese supermercado estaba cerca de nuestra casa así que tardamos muy poco en llegar, entramos y Liam me dio la lista con la intención de coger él el carrito. Yo iba cogiendo las cosas apuntadas en la lista y Liam me seguía empujando un carrito que poco a poco se iba llenando, después de una hora eterna llegamos a mi pasillo favorito: chocolate y galletas. Justo en el momento en el que iba a meter dos cajas de oreos vi a unas chicas que estaban discutiendo por un bote de Nutella. Sonreí, no se podían parecer más a nosotros, la chica de pelo negro fue la que más me impresionó, estaba sosteniendo el bote cómo si fuese un bebé al que quisiera proteger, miré a Liam y no pudimos evitar soltar una carcajada.

2 comentarios:

  1. ¡Cuánto tiempo sin tu novela!
    Que sepas que me gusta un montón ;)

    Un besito*-*

    P.D: Pasate por la mia :)

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    1. No hace falta que me digas que me pase por tu novela,
      ¡Si lo hago diariamente!
      Tampoco hace falta decirte que me encanta la tuya y que intentaré subir más a menudo.

      Un beso :)

      P.D: Siguela por favor que me has dejado con la intriga. ;)

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